Cuando te tomas el tiempo de trabajar en un inodoro, querrás empezar a sustituir piezas para que vuelva a funcionar como antes. Es una reacción natural, ya que supones que el problema tiene que ver con el inodoro y que la sustitución de las piezas corregirá el problema al instante. Esto no siempre es así.
Vas a tener serias dudas sobre el funcionamiento del inodoro y esto no es lo ideal a largo plazo. Es entonces cuando vas a querer averiguar por qué el inodoro sigue funcionando después de sustituir todas las piezas.
El inodoro sigue funcionando después de sustituir todas las piezas porque está atascado o una de las piezas es incompatible. Para solucionar el problema, utiliza un cepillo de nailon para desatascar el inodoro, inspecciona los nuevos componentes y aprieta los que aún estén sueltos.
A menudo tendrás que pensar en la fontanería, porque es ahí donde radica el problema cuando un inodoro sigue funcionando. No des por sentado que el problema son las piezas.
Puede que sea algo dentro de las tuberías lo que esté creando el problema. Tendrás que utilizar un cepillo de nailon o una serpiente de desagüe para llegar al fondo de la cuestión lo antes posible.
A continuación te explicamos cuáles son algunas de las principales razones por las que un inodoro sigue funcionando después de haber sustituido todas las piezas.
Razones por las que el inodoro sigue funcionando después de sustituir todas las piezas
1. Inodoro obstruido
Esta es la razón número uno por la que un inodoro sigue funcionando después de sustituir todas las piezas. Vas a tener un inodoro atascado en tus manos. Esto ocurre cuando el inodoro está atascado y hay algo en su interior que afecta a la presión del agua en la instalación.
Querrás actuar rápidamente cuando esto ocurra. El objetivo es averiguar dónde está la zona atascada y qué hacer al respecto. Esto incluye tomarse el tiempo necesario para avanzar actuando con rapidez.
Es conveniente que te tomes el tiempo necesario para empezar utilizando un cepillo de nailon e intentando desatascar el inodoro. Otra opción es utilizar una serpiente de desagüe para excavar más profundamente.
2. Sustitución incorrecta de las piezas
También es posible que las piezas que has instalado no sean las correctas. Esto es importante porque algunas piezas no son universales. Tendrás que mirar la disposición de tu inodoro y qué componentes se han instalado.
Si has instalado los componentes erróneos, las cosas no van a funcionar como estaba previsto y el inodoro seguirá funcionando. Vuelve atrás y echa un vistazo a las piezas que has instalado. ¿Hay alguna pieza que no deba estar ahí? Es esta pieza la que habrá que cambiar.
3. Problema de fontanería
Puede que tengas un problema de fontanería subyacente. Esto significa que hay una tubería que está a punto de reventar o que hay algo que la ha dañado. Tendrás que empezar a echar un vistazo a cómo está configurado el desagüe del inodoro.
Querrás ver dónde está el problema. Esto incluye la línea de agua que va al inodoro. Examina estas tuberías para ver si hay algo dañado en ellas. Tendrás que sustituir la tubería si ese es el caso.
4. Disminución del rendimiento de la descarga
¿Hay algún problema con la descarga? Es posible que tengas un problema de presión de agua en esta parte de la vivienda. Si es así, tendrás que revisar la línea de agua y ver cuál es la presión actual.
Muchas personas también informan de problemas con otras instalaciones relacionadas con el agua en la casa. Esto incluye las duchas y los grifos. Si esto es algo que te resulta familiar, es probable que tengas un problema relacionado con el agua que ha reducido la presión. Deberás recorrer la vivienda y probar los distintos grifos para ver si es así.
Reflexiones finales
Examina estos consejos si el inodoro sigue funcionando después de sustituir todas las piezas. Si el inodoro sigue funcionando después de sustituir todas las piezas, es probable que la instalación esté obstruida o que una de las tuberías esté dañada. Para empezar, inspecciona el funcionamiento de la cisterna, utiliza un cepillo de nailon para desatascar la instalación y asegúrate de volver a comprobar las piezas de recambio.
Siempre querrás centrarte en lo que has instalado como recambio. A veces, puede que estés utilizando la pieza de recambio equivocada y que esa sea la razón de que sigan surgiendo estos problemas.
No des por sentado que todo está bien cuando podría no estarlo. Deberás ser diligente y asegurarte de trabajar hacia atrás. Esto incluye mirar la presión del agua en el inodoro.